Nombramiento Episcopal | Diocesis de Antequera Oaxaca

 

IOANNES PAVLVS, EPISCOPVS

SERVVS SERVORVM DEI

A nuestro amado hijo Jesús Ramos Ratzinger y a todos los hermanos

de la Diócesis de Antequera Oaxaca, salud y paz de Dios.

“Y algunos fueron designados como pastores para el perfeccionamiento de los santos, para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo.” (cf. Ef 4:11-12) 

La santa vocación al pastorado, como nos enseña el apóstol Pablo en su Carta a los Efesios, no es un don otorgado para la exaltación personal, sino para el servicio. El Señor Jesús, Cabeza del Cuerpo Místico que es la Iglesia, llama a algunos de su pueblo a convertirse en instrumentos visibles de su acción invisible: pastores que cuidan, ministros que sirven, maestros que instruyen y construyen la unidad de fe y caridad entre sus hermanos. 

El episcopado, por tanto, es ante todo una misión de amor, sacrificio y dedicación. El Obispo es quien, con el cayado de la Palabra y la unción del Espíritu, guía al rebaño por los caminos de la verdad, protege a los débiles, levanta a los caídos y anima a los firmes en la fe. Es el primer servidor de su pueblo y el último en la búsqueda del honor personal. Su autoridad nace del ejemplo, la fidelidad al Evangelio y la comunión con la Iglesia de Cristo.

Por lo tanto, quienes son llamados a este ministerio deben ser "hombres de Dios", amantes de la oración, prudentes en sus decisiones, pacientes en las dificultades y ardientes en su celo por la salvación de las almas. En tiempos de incertidumbre y desafío, el mundo necesita pastores santos, valientes y alegres; pastores que escuchen a su pueblo, caminen con él y no duden en dar la vida por sus ovejas.

Así, convencidos de sus méritos, de la firmeza de su fe católica y de su liderazgo, y confiados en la acción del Espíritu Santo que nunca abandona a su Iglesia, lo nombramos por esta Nuestra Bula y con la autoridad del Sucesor de Pedro, Obispo Diocesano de la Diócesis de Antequera Oaxaca.

Tu nombre será inscrito entre los pastores legítimos de esta Iglesia Particular, y en ti, el pueblo de Dios verá una señal de la presencia del Pastor Eterno. Te instamos a fomentar la comunión, cultivar la disciplina, preservar lo sagrado y proclamar con vigor la doctrina apostólica.

De ahora en adelante, sé padre, hermano y servidor de todos: el clero, los religiosos, las familias, los jóvenes, los pobres y los pequeños. Que tus palabras sean siempre claras, tu conducta irreprochable y tu vida un Evangelio vivo.

Dado en Roma, junto a Pedro Apóstol, el día primero de agosto del Año Jubilar del Señor 2025, primero de Nuestro Pontificado.

✠ Ioannes Paulus Pp. I

Pontifex Maximus

Ego svbscriptvm,
✠ Petrus Schneider Cardinalis PAROLIN
Cardinalis-Episcopus Ostiensis et Albanensis.